V. Viniegra, C. J. González, J. I. Jáuregui
La actividad industrial de transformación de alimentos de origen vegetal y, dentro de ella, la de producción de tomate en conserva, es una fuente significativa de contaminación de las aguas. En los procesos de elaboración se utiliza agua en numerosas fases por lo que los caudales empleados son elevados y además se generan vertidos con altos niveles de DQO y DBO. Los requisitos exigidos por la legislación exigen la búsqueda de soluciones que minimicen dicha contaminación. Se ha realizado, de manera piloto, la auditoría del proceso de fabricación de una empresa productora de tomate en conserva, definiendo e identificando las operaciones susceptibles de optimización y caracterizando analíticamente los vertidos. La aplicación de medidas correctoras ha permitido disminuir la carga contaminante total generada y reducir significativamente el consumo de agua (24,6%)
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