En un reciente volumen de estudios sobre las relaciones iberico-holande- sas 1 sostuve que la historia de los contactos culturales iberico-holandeses atin est a por escribirse. El prop6sito de este ensayo es trabajar sobre el terna de los viajes como uno de los elementos que constituyen dichas relaciones y explican por que esta tarea puede llegar a ser, en efecto, muy dificil. Se asume generalmente que los viajes, al aumentar el conocimiento sobre otras culturas, pueden contribuir a un mayor entendimiento entre los pueblos y por 10 tanto pueden atenuar tensiones e inclu
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