El machismo afecta a nuestras vidas de múltiples maneras. Si lo pensamos, lo primero que vendrá a nuestra mente pueden ser las asesinadas por violencia de género, las violaciones, el maltrato físico o psicológico. También podemos pensar en los chistes machistas, los llamados micromachismos, la violencia obstétrica o como el peso de los cuidados recae sobre las mujeres.
Todos estos son ejemplos de cómo el patriarcado nos daña. Pero hay una parte en la que no siempre pensamos, y es muy importante; cómo el patriarcado afecta a lo que sentimos y cómo lo sentimos.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados