Suecia tiene el privilegio de surtir sus despensas con materias primas inencontrables o escasas en otras latitudes. Del mar Báltico, el salmón, el arenque y el exclusivo caviar anaranjado de Kalix del golfo de Botnia; del bosque, toda clase de frutos. Sus cocineros logran hacer de su tradición una revolución.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados