Ayuda
Ir al contenido

Dialnet


Síndrome del niño zarandeado. Artículo monográfico.

    1. [1] Hospital Miguel Servet

      Hospital Miguel Servet

      Zaragoza, España

    2. [2] Centro Salud Valdefierro. Zaragoza. España.
    3. [3] Centro de Salud Universitas. Zaragoza. España
    4. [4] Centro de Salud Calatayud Norte. Zaragoza. España
  • Localización: Revista Sanitaria de Investigación, ISSN-e 2660-7085, Vol. 3, Nº. 6, 2022
  • Idioma: español
  • Enlaces
  • Resumen
    • español

      El síndrome del niño zarandeado engloba una serie de lesiones cerebrales provocadas por una sacudida vigorosa del bebé. La incidencia es actualmente entre 20-25 niños de cada 100.000 menores de 2 años. La mayoría se producen antes del año, con una incidencia mayor en lactantes menores de 6 meses1. Este síndrome puede presentar una manifestación súbita de convulsiones, deterioro neurológico agudo o problemas cardiorrespiratorios, situaciones que obligan a los cuidadores a solicitar atención sanitaria de urgencia.

      A menudo, las circunstancias en las que se produce son referidas por el cuidador de forma poco específica y variable en el tiempo. En la mayoría de los casos las lesiones son producidas tras un episodio de llanto inconsolable que llega a desesperar al cuidador, en otras, se trata de un intento de reanimación ante un episodio de apnea. La sospecha se plantea ante un lactante con hemorragia subdural, en ausencia de un traumatismo accidental referido por los cuidadores o una causa médica previamente conocida.

      El diagnóstico definitivo requiere siempre de pruebas complementarias de imagen (TAC, RNM, RX), y pruebas oftalmológicas para la detección precoz de hemorragias retinianas.

      Dada la frecuencia de secuelas de carácter grave (discapacidades, retraso psicomotor…) y la tasa de mortalidad (en torno al 25%), es imprescindible una adecuada estrategia de prevención, consistente en una adecuada formación de los padres, donde cobrará especial importancia el papel del profesional enfermero/a y/o matrona, aprovechando las consultas prenatales o las primeras revisiones de atención primaria del neonato.

    • English

      Shaken Baby Syndrome encompasses a series of brain lesions caused by vigorous shaking of the infant. The incidence is currently between 20-25 per 100.000 under 2 years of age. Most occur before the age of one year, with a higher incidence in infants younger than 6 months. This syndrome may present with a sudden manifestation of seizures, acute neurological impairment or cardiorespiratory problems, situations that compel caregivers to seek emergency health care.

      Often, the circumstances in which it occurs are referred by the caregiver in a non-specific and time-varying manner. In most cases, these lesions are produced after an episode of inconsolable crying that makes the caregiver feel overwhelmed and frustrated. In others, it is an attempt to resuscitate after an episode of apnea. Suspicion will arise in an infant with subdural hemorrhage, in the absence of an accidental trauma referred by the caregivers or a previously known medical cause.

      Definitive diagnosis always requires complementary imaging test (CT, MRI, X-ray) and ophthalmologic tests for early detection of retinal hemorrhages.

      Given the frequency of serious sequelae (disabilities, psychomotor retardation, etc.) and the mortality rate (around 25%), an adequate prevention strategy is essential, consisting of adequate parental education, in which the role of the nurse and/or midwife is especially important, taking advantage of prenatal consultations or the first primary care check-ups of the newborn.


Fundación Dialnet

Dialnet Plus

  • Más información sobre Dialnet Plus

Opciones de compartir

Opciones de entorno