Resumen de State obligations in the context of unhealthy diets: Paving the way within the Inter-American Human Rights System

Belén Ríos, Isabel Barbosa, Ariadna Tovar Ramírez

• español

  Las enfermedades crónicas no transmisibles (ENT) son la principal causa de morbilidad, mortalidad y discapacidad en las Américas. Las ENT son en gran medida prevenibles dada la naturaleza modificable de sus factores de riesgo, incluyendo el consumo elevado de productos procesados y ultra-procesados, asociado con las prácticas de la industria de productos comestibles y de bebidas. Este artículo explora los factores de riesgo de las ENT relacionados con la dieta como un asunto de derechos humanos que puede y debe ser abordado en el ámbito del Sistema Interamericano de Derechos Humanos. Se argumenta que los Estados podrían ser responsables por incumplir la obligación de garantizar los derechos humanos; específicamente, al no actuar con la diligencia debida y regular la conducta de la industria de productos comestibles y bebidas. Además, se argumenta que los Estados también podrían resultar responsables por el incumplimiento de la obligación de respetar los derechos humanos, considerando su complicidad con la industria de productos comestibles y bebidas.

• English

  Noncommunicable diseases (NCDs) are the leading cause of morbidity, mortality, and disability in the Americas. NCDs are largely preventable because of the modifiable nature of their risk factors, including the elevated consumption of processed and ultra-processed products that can be traced to the recurrent practices of the food and beverage industry. This article explores diet-related risk factors to NCDs as a human rights issue that can and should be addressed within the Inter-American Human Rights System (IAHRS). In particular, we argue that States can potentially be held responsible for their failure to comply with the obligation to guarantee human rights; specifically, by not acting with due diligence through the regulation of the food and beverage industry. Moreover, we argue that States can also potentially be held responsible for failing to comply with the obligation to respect human rights, considering its complicity with the food and beverage industry.