México
Las niñas son testigos de la violencia de género, pero ellas mismas son receptoras de la violencia como parte de su formación para la vida adulta. Quizá las niñas no saben que su derecho a una vida libre de violencia está siendo incumplido, pero sí saben y sienten que sus hermanos varones tienen más tiempo para jugar, reciben mayores recursos y atenciones. Esta reflexión parte de testimonios de niñas en contexto indígena, quienes en grupos focales expresaron cómo son tratadas en su condición de niñas y en relación con los niños en los espacios de la familia, la escuela y la comunidad. Para el análisis, se parte de la perspectiva de género, especialmente desde el enfoque que sostiene que el sistema patriarcal construye y reproduce desigualdad de género en todos los ámbitos de la vida, sin importar condición social o etnia. Se corrobora que las niñas desde la primera infancia aprenden que ellas, sus hermanas, su madre y todas las mujeres que conocen están para atender a sus congéneres masculinos, sin que ello signifique algún reconocimiento o retribución; es decir, las niñas son formadas para aceptar el trato desigual en su familia, escuela y comunidad.
Girls witness gender-based violence, but they are as well recipients of violence as part of their education for adult life. Girls may not know that their right to a life free form violence is being violated, but they do know and feel that their brothers have more time to play and receive more resources and attention. This reflection is based on the testimonies of girls in an indigenous context, who expressed in focus groups how they are treated as girls, as well as in relation to boys in the family, school, and community spaces. The analysis started from the gender perspective, especially from the approach that maintains that the patriarchal system builds and reproduces gender inequality in all areas of life, regardless of social status or ethnicity. It is corroborated that girls learn from early childhood that they, their sisters, their mother, and all women they know are there to assist their male counterparts, without any recognition or retribution, that is, girls are educated to accept unequal treatment in their family, school, and community.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados