Burcu Ateş Özcan, Burcu Yeşİlkaya
Introducción: Debido al nuevo tipo de enfermedad por coronavirus (COVID-19) que se observa en todo el mundo, muchos países tienen dificultades tanto en términos de salud como de economía. Se cree que la infección y el miedo a la muerte a causa de la enfermedad pueden alterar la psicología de las personas. Además, las precauciones como el distanciamiento social y la cuarentena para prevenir la propagación de la enfermedad y la prolongación de estas intervenciones pueden agravar aún más las condiciones, como los trastornos del estado de ánimo y el estrés. Este estudio tuvo como objetivo determinar el estado de alimentación emocional de las personas durante la pandemia de COVID-19 y determinar su efecto sobre una actitud de alimentación saludable.
Material y métodos: Se trata de un estudio descriptivo transversal con un total de 578 adultos sin diagnóstico y tratamiento de COVID-19 (422 [73%] mujeres, 156 [27%] hombres). El estudio se realizó utilizando la plataforma de encuestas web Google Forms. El enlace a la encuesta se compartió a través de WhatsApp e Instagram. Se pidió a los participantes que compartieran el enlace del estudio para llegar a la mayor cantidad posible de participantes en todo el país utilizando el método conocido como muestreo de bola de nieve. Se aplicó a los participantes un formulario de cuestionario que incluye características sociodemográficas, la versión turca del Emotional Eater Questionnaire (EEQ-TR) y la Attitude Scale for Healthy Nutrition (ASHN). Los formularios EEQ-TR y ASHN se respondieron dos veces, retrospectivamente para el período anterior al COVID y prospectivamente durante el período COVID.
Resultados: Si bien las puntuaciones promedio de alimentación emocional aumentaron en comparación con las puntuaciones anteriores a COVID-19, los individuos pasaron de comedores emocionales de bajo nivel a comedores emocionales (p <0,000). Por otro lado, los puntajes promedio de ASHN disminuyeron y los individuos cambiaron de una actitud de alimentación saludable de nivel medio a un nivel bajo (p <0,000). A medida que aumentó el período de cuarentena, la alimentación emocional, el peso corporal y el índice de masa corporal (IMC) aumentaron y la actitud de alimentación saludable disminuyó (p <0,05).
Conclusiones: La alimentación emocional de las personas aumentó debido al distanciamiento social, la auto cuarentena o el aislamiento en la pandemia de COVID-19. Se ha descubierto que estos cambios son efectivos para una alimentación saludable de manera negativa. No se recomienda una alimentación no saludable a largo plazo para la salud de las personas. Por lo tanto, es necesario informar a las personas sobre el manejo del estrés, la nutrición saludable, la importancia del ejercicio regular y los patrones de sueño.
Introduction: Because of the new type of coronavirus disease (COVID-19) seen worldwide, many countries have a difficult time both in terms of health and economy. It is thought that infection and fear of death owing to the disease may cause a disturbance in the individuals’ psychology. Moreover, precautions such as social distancing and quarantine to prevent the spread of the disease and the prolongation of these interventions may further aggravate the conditions, such as mood disorders and stress. This study was aimed to determine the emotional eating status of individuals during the COVID-19 pandemic and to determine its effect on a healthy eating attitude.
Material and methods: This is a cross-sectional descriptive study with a total number of 578 adults without COVID-19 diagnosis and treatment (422 [73%] women, 156 [27%] men). The study was conducted using the Google Forms web survey platform. The link to the survey was shared via WhatsApp and Instagram. The participants were asked to share the study link to reach out to as many potential participants as possible throughout the nation using the method known as snowball sampling. A questionnaire form which includes sociodemographic characteristics, the Turkish version of the Emotional Eater Questionnaire (EEQ-TR), and the Attitude Scale for Healthy Nutrition (ASHN) were applied to the participants. EEQ-TR and ASHN forms were answered twice, retrospectively for the pre-COVID period and prospectively during the COVID period.
Results: While average emotional eating scores increased compared to pre-COVID-19 scores, individuals shifted from low-level emotional eaters to emotional eaters (p < 0.000). On the other hand, the average ASHN scores decreased, and individuals shifted from the middle-level healthy eating attitude to a low level (p < 0.000). As the quarantine period increased, emotional eating, body weight, and body mass index (BMI) increased, and healthy eating attitude decreased (p <0.05).
Conclusions: Individuals’ emotional eating increased due to social distancing, self-quarantine, or isolation in the COVID-19 pandemic. These changes are found to be effective in healthy eating in a negative way. Long-term unhealthy eating is not recommended for people’s health. Therefore, it is necessary to inform individuals about stress management, healthy nutrition, the importance of regular exercise, and sleep patterns.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados