El proceso de reforma de las pensiones en Suecia tuvo como objetivo principal crear un sistema financieramente estable en el largo plazo, mejorar la equidad generacional y proporcionar un marco que promoviera la obligatoriedad del ahorro financiero a través del sistema de pensiones. Para este fin, en 1994 el Parlamento sueco aprobó la sustitución de su sistema tradicional de reparto de pensiones públicas de prestación definida por un sistema mixto que incluye dos características principales: una parte de la cotización, en concreto un 16 % de la base salarial, se destinaría a un sistema basado en cuentas nocionales mientras que un 2,5 % se asignaría a cuentas financieras individuales gestionadas por entidades privadas.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados