Sin duda, 2020 ha sido un año de desafíos para las enfermeras y los trabajadores sanitarios de todo el mundo a partir de la implacable propagación del COVID-19. Estos desafíos han sido muchos, incluidos los países y sistemas sanitarios que no estaban preparados para una pandemia, el déficit de equipos de protección individual, la escasez aguda de enfermeras, la mala comunicación de los gobiernos y la falta de datos precisos sobre la morbilidad y la mortalidad del COVID-19 entre enfermeras y trabajadores sanitarios. Las enfermeras están sufriendo angustia psicológica y están exhaustas y agotadas a medida que la segunda ola de la pandemia avanza por todo el mundo. Muchas han sido objeto de violencia y agresión por parte de personas de sus comunidades. En este contexto, las contribuciones de las enfermeras han sido vitales para salvar vidas y la profesión ha aprendido muchas lecciones importantes que resonarán en la práctica de la enfermería en el futuro. Pero los gobiernos deben hacer más, incluso garantizar que las enfermeras sean vacunadas y protegidas más tempranamente cuando esté disponible una vacuna satisfactoria.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados