Las aguas residuales de la industria textil se caracterizan por contener una compleja mezcla de compuestos químicos (entre ellos, los colorantes), elevada cantidad de sólidos suspendidos y sales disueltas, altos valores de temperatura y pH muy variable. El vertido de estas aguas en ríos y lagos provoca severos problemas ambientales. Su tratamiento es una tarea prioritaria aunque difícil porque requiere el empleo de tecnologías innovadoras y avanzados procesos de oxidación. En este sentido, el artículo enlista varios métodos para remover los azocolorantes del agua, desde los tratamientos fisicoquímicos (coagulación/precipitación, ósmosis inversa, ultrafiltración, adsorción en carbón activado, entre otros) hasta los procesos avanzados de oxidación (PAO), entre los que se encuentran plasma no térmico, reactivo Fenton, foto-Fenton, y fotocatálisis.
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