Grupos terroristas como Al Qaeda y la Organización del Estado Islámico (OEI) han aplaudido la actuación de las milicias armadas en el Sahel y la victoria de los talibanes en Afganistán. Pero esos conflictos, lejos de corresponder a una guerra santa global, obedecen a una lógica propia, de carácter local. El uso exclusivo de la fuerza no les pondrá fin.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados