En el pequeño pueblo de Herber Springs (Arkansas, EE.UU.), en agosto de 1959, un par de vecinos se mostraron preocupados porque hacía días que no veían al fotógrafo local, el viejo Mike Disfarmer. Tras llamadas infructuosas a la puerta de su estudio, forzaron la cerradura y lo encontraron muerto. Sus pertenencias se liquidaron por unos pocos dólares. Unos años después, las fotos de Disfarmer se vendían por miles de dólares. esta es la sorprendente historia de Mike Disfarmer.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados