Esta investigación observó la influencia del status socioeconómico en la regulación de la tristeza, el miedo y la rabia en 591 adolescentes escolarizados del caribe colombiano (11-18 años). Como indicadores de estatus socioeconómico se tomaron el estrato residencial de la vivienda/vecindario, y el nivel de educación paterna y materna. La evaluación de cada emoción se realizó independientemente a partir del uso de estrategias de regulación adaptativa, inhibición, y desregulación.
Con análisis estadísticos de varianza se identificaron los impactos de los indicadores socioeconómicos sobre el manejo de las emociones, diferenciando efectos de acuerdo con el sexo y edad de los jóvenes. El estatus socioeconómico bajo del vecindario, así como niveles bajos de escolaridad de ambos padres, predijeron un mayor control en la expresión de emociones por parte de los adolescentes. El uso de estrategias de regulación adaptativa e inhibición indicaron importantes esfuerzos por evitar mostrar sus experiencias emocionales negativas ante los demás, y deseos de ajustar sus reacciones a las exigencias sociales de su entorno. Los resultados también señalaron que de acuerdo con el nivel socioeconómico son diferentes los efectos del sexo y la edad sobre la regulación de emociones.
En el estatus socioeconómico, y nivel educativo de los padres, son elementos que influencian significativamente los procesos emocionales de los adolescentes, dan cuenta de variaciones regulatorias a distintas edades, e informan de diferentes presiones sociales sobre el comportamiento emocional que se espera para cada sexo en cada estatus socioeconómico.
El estatus socioeconómico (SES, por sus siglas en inglés Socio-Economic-Status) es una condición que tiene importantes efectos en la calidad de vida de los adolescentes y sus familias debido a las posibilidades que brinda para acceder a bienes y servicios esenciales para el desarrollo, desde los aspectos más básicos como comprar alimentos y ropa, hasta libros e instrumentos musicales, y demás actividades resultan fundamentales para la estimulación cognitiva y emocional de los durante su crecimiento. En este sentido, la abundancia económica o la escasez financiera corresponden a dos condiciones de vida completamente diferentes que encubren grandes variaciones en las dinámicas familiares entre una familia y otra, influencian las interacciones de padres e hijos al interior del hogar, así como las relaciones que los jóvenes establecen con su entorno.
Especialmente durante la adolescencia, cuando los jóvenes se encuentran en un periodo vital de consolidación de competencias emocionales, el status socioeconómico, como indicador de mayor o menor acceso a opciones de desarrollo, podría ser un componente que explica los caminos diferenciados de ajuste emocional entre unos y otros adolescentes.
La siguiente presentación proporciona una descripción de cómo distintos componentes del SES provocan diferencias en el manejo de las emociones en la adolescencia. En primer lugar, realizamos una descripción de las evidencias de estudios previos respecto al efecto del SES sobre el desarrollo infantil y seguidamente contextualizamos la variable socioeconómica en Colombia, un país de América latina con amplios contrastes económicos, y con inequidades sociales dramáticamente presentes
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados