El estilo de mando militar ha dependido más de las circunstancias que de las preferencias personales. Resulta imprescindible adaptar el grado de centralización a la situación específica. La cadena de mando se ha descentralizado de dos maneras: articulando las unidades, y proporcionando a los escalones inferiores mayor libertad para dirigir las acciones de sus propias unidades subordinadas. La historia militar permite observar la interactiva dinámica que se produce entre organizaciones militares dotadas de diferente grado de centralización y, de este modo, analizar los factores implicados y comprender sus resultados
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados