La empatía como herramienta de aprendizaje: el aprendizaje entre personas desde la emoción

• Alex Mitxelena Etxeberria ^[1] ; Enkarni Gomez Genua ^[1]
  1. [1] Universidad del País Vasco/Euskal Herriko Unibertsitatea

     Universidad del País Vasco/Euskal Herriko Unibertsitatea

     Leioa, España

     
• Localización: Arkitektura eta hábitat-a: pertsonen burujabetza : artikulu-liburua, 2020, ISBN 978-84-1319-206-2, págs. 297-308
• Idioma: español
• Enlaces
  • Texto Completo Libro
• Resumen
  • español

    Este artículo trata de poner en valor el aprendizaje basado en las emociones y en la empatía como herramienta o metodología.

    Medir las emociones no es tarea fácil. Así como medimos la luz a través de los luxómetros y los sonidos a través de los sonómetros, no somos capaces de cuantificar qué emociones nos produce escuchar música, el sonido del río o la luz del atardecer.

    Aunque no podamos medirlas, no se puede dudar de su importancia y valor para que el aprendizaje sea significativo. Producen una impronta que permanece en la vida de las personas, pudiendo incluso cambiar la percepción que tenemos del entorno, la trayectoria vital y la profesional.

    A pesar de que el aprendizaje universitario y la adquisición del conocimiento se mide a través de evaluaciones continuas, mixtas o de examen final, no se pone en cuestión que el sentir es una parte poderosa en el aprendizaje.

    La inteligencia emocional ha estado fuera del aula mucho tiempo, pero a partir de su definición, es necesario integrarla y valorarla en todos los niveles educativos, incluido en el universitario.

    Llevar los sentimientos y las emociones a la adquisición de competencias transversales y curriculares es uno de los objetivos del programa Gaztenpatia de la UPV/EHU, en el cual la ETS de Arquitectura participa desde su inicio cumpliendo ahora su tercera edición con cada vez más participantes, proyectos y demanda.

    Se trata de un programa de prácticas voluntarias y/o curriculares en la que participa alumnado de diferentes titulaciones en proyectos de cooperación al desarrollo de Euskal Fondoa en comunidades de El Salvador, Guatemala y Nicaragua.

    Los grupos de trabajo son interdisciplinares y el trabajo, desarrollado en contextos totalmente ajenos al propio, permite un acercamiento a los problemas planteados desde la emoción y la empatía, poniendo en práctica y desarrollando competencias interpersonales que habitualmente no se trabajan en el aula y que, sin duda, constituyen la base de un aprendizaje significativo de la arquitectura.

  • English

    This article tries to value learning based on emotions and empathy as a tool or methodology. Measuring emotions is not an easy task. Even if we can measure the light through luxometers and sounds through the sound level meters, we are not able to quantify what emotions we experience listening to music, the sound of a river or the light of a sunset.

    Even if we can not measure them, we can not doubt of their importance and value for a meaningful learning They produce an imprint that remains in the lives of people, and can even change the perception we have of the environment, our life trajectory and also the professional one.

    Although university learning and acquisition of knowledge is measured through continuous, mixed or final examinations, it is not questioned that feeling is a powerful part of learning. Emotional intelligence has been out of the classroom for a long time, but from its definition, it is necessary to integrate and value it at all educational levels, including the university level.

    Bringing feelings and emotions to the acquisition of soft and curricular skills, is one of the objectives of Gaztenpatia program at the UPV / EHU, in which the School of Architecture takes part from its beginning, now fulfilling its third edition with more and more participants, projects and demand.

    It is a program of voluntary and / or curricular practices in which students from different degrees participate in development cooperation projects of Euskal Fondoa in communities of El Salvador, Guatemala and Nicaragua. The work groups are interdisciplinary and the work, developed in contexts totally unrelated to their own, allows an approach to the problems raised from the emotion and empathy, putting into practice and developing interpersonal skills that are usually not worked in the classroom and that, undoubtedly, are the basis of a significant learning of architecture.