1. La ERC tiene una elevada incidencia y prevalencia con un alto impacto sobre la calidad de vida y mortalidad de los pacientes, lo que supone un importante consumo de recursos sanitarios.
2. En un porcentaje relevante de pacientes no se dispone de un diagnóstico etiológico de la ERC, lo que limita sus posibilidades de tratamiento y curación.
3. Las acciones dirigidas a mejorar el diagnóstico permitirán favorecer un mejor conocimiento de las causas de la ERC y optimizar el tratamiento.
4. La biopsia renal, constituye el procedimiento necesario para el estudio histopatológico del tejido renal que permitirá establecer el diagnóstico, las posibilidades de tratamiento y el pronóstico del dan˜ o renal.
5. El trasplante renal constituye la mejor opción de TRS. La causa más frecuente de pérdida del injerto renal es el rechazo. La biopsia renal es el único método para establecer el tipo de rechazo e iniciar el tratamiento más adecuado.
6. La planificación del tratamiento de la enfermedad renal se establece con base en un diagnóstico preciso y este se basa en el diagnóstico histológico. La falta de una adecuada interpretación diagnóstica, bien por inexperiencia del patólogo, bien por falta de medios diagnósticos (microscopia electrónica), condiciona y limita las opciones de tratamiento en perjuicio del enfermo.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados