Actualmente definimos el dolor como una experiencia desagradable, subjetiva y propia de cada persona. La Asociación Internacional para el Estudio del Dolor lo define como «una sensación sensorial desagradable y estresante a nivel emocional asociada a un daño físico existente o potencial». El dolor es un síntoma que acompaña a algunas patologías y, al ser una experiencia sensorial y estresante, afecta directamente a la calidad de vida de los que lo sufren, sobre todo si se perpetúa en el tiempo. En estos términos estamos hablando del dolor crónico, dolor que desde hace pocos años tenemos ya catalogado como una enfermedad.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados