La alta dirección de una empresa, por la propia naturaleza de su función, está obligada a tomar importantes decisiones económicas, financieras y comerciales. Resulta obvio señalar que estas importantes decisiones deben ir precedidas por un estudio concienzudo de una información amplia, objetiva y realista sobre el asunto a decidir. La inexistencia de esta necesaria información, con todos sus atributos de amplitud, objetividad y realismo, dejaría a la gerencia abandonada a los impulsos de su propia intuición.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados