En coincidencia con las últimas fechas del año se reproduce siempre, desde que la Navidad es consumo y la Publicidad, publicidad, el fenómeno de la avalancha de anuncios. Los periódicos y las revistas engordan hasta hacerse libros de más de cien páginas. Los suplementos dominicales se convierten en un muestrario d bebidas y la televisión es una máquina de anunciar juguetes y colonias.
Hay importantes presupuestos anuales que se consumen, casi exclusivamente, en las pocas fechas que van del 1 de diciembre al 7 de enero. Juguetes y perfumería, precisamente, son el ejemplo más claro.
Por esta razón, no deja de ser interesante que hagamos un pequeño recuento de lo que Santa Claus y Sus Majestades los Magos de Oriente nos han dejado en el aspecto publicitario, centrándonos en el medio más poderoso. Se encarga de ello David Torrejón.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados