14:46 horas del 11 de marzo de 2011, un terremoto de nueve grados en la escala Richter en el océano Pacífico paraliza once centrales nucleares en Japón, entre ellas la de Fukushima. Un día después, tras una fuerte explosión en esa central, el pánico a un nuevo accidente nuclear se instala en todo el mundo. Un poco más tarde, un grupo de científicos suecos se reúne y declara que están hartos de que solo se hable de temas relacionados con la radioactividad cuando se producen trágicos accidentes como este.
In 2011, following the Fukushima accident, a group of Swedish scientists and artists decided to set up a project aimed at spreading the message that we live alongside radiation in our daily life. They designed a system to convert into musical notes the frequencies of the radiations emitted by different radioactive isotopes on decaying, thereby producing a record that enjoyed some critical acclaim and public success.
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