Durante los reinados de los primeros borbones, el confesor real desempeñó un papel fundamental en las provisiones beneficiales pertenecientes a la corona, así como en el resto de las tareas relacionadas con la gestión del patronato regio. Sin embargo, tras el ascenso de Carlos III al trono español en 1759, la situación cambió. Joaquín de Eleta, al frente del confesionario real durante el reinado de este monarca, no llegaría a disfrutar de las cotas de poder que alcanzaron sus predecesores dentro del ámbito beneficial. En este trabajo, pretendemos conocer el alcance de sus actuaciones en lo que respecta a la gestión del Patronato Real. En concreto, analizaremos su implicación y su peso en el reclutamiento del clero beneficial en un momento en el que la provisión de la práctica totalidad de los beneficios eclesiásticos anteriormente reservados al papado había pasado a manos de la corona.
During the reigns of the first Bourbons, the royal confessor played a fundamental role in beneficial provisions belonging to the Crown, as well as in the rest of the tasks related to the management of Royal Patronage. However, since the ascent of King Charles III to the Spanish throne in 1759, the situation changed. Joaquín de Eleta, in charge of the royal confessional during the reign of this monarch, did not manage to enjoy echelons of power that his predecessors achieved within the beneficial area. This paper will try to know the scope of his actions with regard to the management of Royal Patronage. In particular, we will look at his involvement and his weight in beneficial clergy recruitment at a time when the provision of almost all of ecclesiastical benefices previously reserved to papacy had passed over into the hands of the Crown.
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