Ayuda
Ir al contenido

Dialnet


Resumen de Medios y poder: 1984

Mónica Gruber

  • español

    La II Guerra Mundial, la Shoah, el Gulag, Hiroshima y Nagasaki, constituyen un largo listado de hechos ignominiosos que han marcado a fuego a la humanidad. No en vano, lúcidos intelectuales y artistas alzaron sus voces para señalar el fracaso de los antiguos paradigmas racionales que sustentaron el modernismo: si ese racionalismo había conducido al fracaso, había que buscar nuevas estructuras que ayudasen a superar el pasado. Es así que avizoraron una esperanza en el resurgimiento del mito.

    Con la posguerra, se abrió una etapa conocida como la Guerra Fría, que se caracterizó, entre otras cosas, por el vertiginoso crecimiento comunicacional, así como por el desarrollo de todo tipo de mecanismos de control y gadgets que abarcaron desde microfilms y micrófonos, hasta cámaras. La URSS y los EEUU, con sus servicios secretos jugaron una guerra de nervios donde todo parecía válido: suero de la verdad, torturas diversas y lavado de cerebros, entre otros, fueron términos que se trasladaron desde el campo político a la literatura, el cine y el teatro. Dichos elementos abonaron la imaginación de los artistas, que en casos como el que analizamos situaron en un futuro distópico las críticas al mundo que les rodeaba.

    El presente trabajo se propone analizar algunos aspectos de la novela 1984 de George Orwell (1948), explorando las líneas de profundidad hermenéutica que dieron vida a sus personajes y conflictos, para luego abordar la transposición cinematográfica homónima.

    Al comparar la relación entre los medios de comunicación y el poder –un aspecto fundamental tanto en el texto literario con su incidencia en el audiovisual– sostenemos que así como la vida de los ciudadanos en la novela es totalmente controlada por los agentes de poder, esto vuelve a quedar en evidencia en la película del mismo nombre filmada en el año 1984, situación que también se extiende hasta hoy. Muy a nuestro pesar, los totalitarismos continúan vigentes en la actualidad.

  • English

    World War II, the Shoah, the Gulag, Hiroshima and Nagasaki, constitute a long list of ignominious facts that have set fire to humanity. Not surprisingly, lucid intellectuals and artists raised their voices to point out the failure of the ancient rational paradigms that underpinned modernism: if that rationalism had led to failure, it was necessary to look for new structures that would help to overcome the past. Thus they saw a hope in the resurgence of the myth.

    With the postwar period, a stage known as the Cold War was opened, which was characterized, among other things, by the dizzying growth of communication, as well as the development of all kinds of control mechanisms and gadgets ranging from microfilms and microphones, to cameras. The USSR and the US, with their secret services, played a war of nerves where everything seemed valid: serum of truth, various tortures and brainwashing, among others, were terms that moved from the political field to literature, cinema and theater. These elements contributed to the imagination of the artists, who in cases such as the one we analyzed, placed criticism on the world around them in a dystopian future.

    The present work aims to analyze some aspects of George Orwell ‘s novel 1984 (1948), exploring the lines of hermeneutic depth that gave life to its characters and conflicts, and then to approach the homonymous cinematographic transposition.

    In comparing the relationship between the media and power –a fundamental aspect both in the literary text and its impact on the audiovisual– we maintain that just as the life of the citizens in the novel is totally controlled by the agents of power, this is again evident in the film of the same name filmed in 1984, a situation that also extends today. Much to our regret, totalitarianisms continue to prevail today.

  • português

    A II Guerra Mundial, a Shoah, o Gulag, Hiroshima e Nagasaki, constituem uma longa lista de fatos ignominiosos que marcaram a fogo à humanidade. Por isso, lúcidos intelectuais e artistas marcaram o fracasso dos antigos paradigmas racionais que sustentaram o modernismo: se esse racionalismo tinha levado ao fracasso, havia que procurar novas estruturas que ajudassem a superar o passado. Desse modo, divisaram uma esperança no ressurgimento do mito.

    Com o pós-guerra, abriu-se uma etapa conhecida como a Guerra Fria, que se caracterizou por o crescimento rápido das comunicações, e por o desenvolvimento de todo tipo de mecanismos de controle e gadgets que abarcaram desde microfilmes e microfones até câmaras. A URSS e os EEUU, com seus serviços segredos, brincaram uma guerra de nervos onde tudo parecia válido: soro da verdade, torturas, lavado de cérebro, entre outros, foram termos que se transladaram desde o campo político até a literatura, o cinema e o teatro.

    Esses elementos contribuíram à desenvolver a imaginação dos artistas, que em casos como o que se analisa situaram num futuro distópico as críticas ao mundo que lhes rodeava.

    Este trabalho analisa aspectos da novela 1984 de George Orwell (1948) explorando as linhas de profundidade hermenêutica que deram vida aos personagens e conflitos, para depois abordar a transposição cinematográfica homônima.

    Ao comparar a relação entre os meios de comunicação e o poder, dizemos que assim como a vida dos cidadãos na novela é controlada pelos agentes do poder, o filme feito em 1984 mostra a mesma questão, situação que até hoje pode ser evidenciada, já que os totalitarismos estão ainda vigentes.


Fundación Dialnet

Dialnet Plus

  • Más información sobre Dialnet Plus