Resumen de Organizaciones sociales como formas de participación política. Estudio de caso en un barrio periférico urbano de Argentina
Las acciones colectivas (AC) y los movimientos sociales se han convertido en el mundo moderno en una poderosa fuerza de cambio. Hoy el descontento de la sociedad civil se transforma en distintas formas de participación política y social. Se constituyen grupos que accionan colectivamente, creando formas de organización social, que se expresan con diferentes fórmulas la acción. Tenemos una larga trayectoria en el estudio de movimientos sociales y cómo éstos comprenden una forma de articulación individuo-sociedad-estado. Entendemos que un actor colectivo eleva un reclamo al espacio público donde cobra fuerza y necesariamente entra a dialogar con el estado y con la sociedad civil a la vez. En los últimos trabajos que realizamos ( tomas de tierras desde 1981 que se profundizan después de 1983, saqueos desde 1989,protestas del tipo “ cacerolazos ” en el 2001 y piquetes 2000) nos preguntábamos sobre la formación de una nueva politicidad de las clases populares. Es así como centramos el trabajo en la idea de participación que se fue construyendo en asentamientos pobres a lo largo del tiempo, ligada al trabajo comunitario y que se vio atravesada por la implementación de políticas sociales y por la aparición de nuevas prácticas políticas. Estos estudios sucesivos en el terreno nos permitieron comprender y reconstruir repertorios de acción colectiva (Tilly, 2010) como formas de acción política que se forman en luchas anteriores y que marcan las características de una época. En este sentido, es importante poder captar el proceso en el que identificamos la dinámica de la contienda política (Mc Adam, Tarrow y Tilly, 2005). Tanto la idea de repertorios como la de dinámica están en la base de un programa generador de desarrollos históricos que nos permite aprehender un proceso político más general donde la acción colectiva no se agota con la aparición y activación de los movimientos sociales, sino que va más allá, reconstruyendo un idea de proceso (Mc Adam, Tarrow y Tilly, 2005: xx). Nos interesa centrar la atención en los nuevos repertorios de la acción colectiva instaurados a partir de la crisis del 2001 y explicar las formas que han asumido mediante el paso de una politicidad centrada en el mundo del trabajo a una politicidad centrada en el barrio, con inscripción territorial y, actualmente, volviendo a identificarse con partidos políticos.
