Un postulado básico en economía del bienestar dice que, bajo supuestos usuales, todo estado Pareto-óptimo de Ia economía puede alcanzarse como un equilibrio competitivo descentralizado, siempre y cuando el ingreso fijo (propiedad) de los individuos pueda ser previamente redistribuido mediante impuestos fijos ("lump-sum taxes") ideales, desligados de toda decisión económica de los individuos. El problema es que, desafortunadamente, Ia aplicación de este teorema requiere una información mayor de Ia que autoridad hacendaria alguna tiene o puede esperar conseguir, a saber, Ias preferencias detalladas y el ingreso potencial de cada miembro de Ia sociedad.
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