Hay determinadas enfermedades oculares, tales como glaucoma crónico y catarata senil que se dan en personas de edad avanzada (mayores de 70 años), población que aumenta en nuestra sociedad debido a la mayor esperanza de vida, por lo que hay un gran porcentaje de personas que pueden padecer estas enfermedades por el simple hecho de ser mayores y si tuviéramos en cuenta otros factores (antecedentes familiares, enfermedades sistémicas, medicación...) las posibilidades de padecer dichas enfermedades aumentarían exponencialmente. Es muy frecuente, en nuestra práctica diaria, encontrarnos con pacientes que presentan dichas patologías sin apenas sospecharlo, por eso es tan importante el trabajo conjunto de ópticos-optometristas con oftalmólogos a la hora de resolver casos como estos al igual que hacer una labor de prevención y detección precoz de dichas patologías para así evitar llegar a daños severos irreversibles
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