La economía y muchas empresas españolas han protagonizado un proceso de internacionalización entre 2000 y 2018 que, a grandes rasgos, puede considerarse como exitoso.
En dicho periodo, las exportaciones españolas han crecido a un ritmo tan alto como las alemanas, y muy por encima de las italianas y francesas, alcanzando un grado de apertura superior al de estas dos últimas.
Con todo, este proceso de internacionalización se enfrenta a diversos riesgos y retos, que son más relevantes precisamente en la medida en que la economía española es relativamente abierta al exterior.
Algunos de estos retosson “viejos conocidos”, como el déficit en la balanza de bienes o una base empresarial exportadora sesgada hacia las microempresas. Al mismo tiempo, aparecen riesgos nuevos. Por un lado, por primera vez después de la crisis, los indicadores de actividad exterior se están desacelerando rápidamente. Por otro, diversas actuaciones de grandes potencias económicas parece que ponen en cuestión el modelo de relaciones comerciales basado en reglas conocidas y previsibles. Ante todo ello, es necesario actuar para potenciar la competitividad de las empresas españolas.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados