El uso de la termografía infrarroja supone un gran avance para el control y buen manejo de una explotación porcina. Es de gran utilidad no sólo para comprobar el estado sanitario de los animales, ya que permite detectar temperaturas anormales que podrían pasar desapercibidas para el operario, sino también para detectar fallos en la infraestructura del edificio, paneles de control eléctricos, sistemas de circulación del aire, etc.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados