El izado de dovelas es un proceso complejo que constituye uno de los puntos críticos en la fase de construcción de un puente por esta metodología. Un error de cálculo en las fuerzas actuantes o un fallo en la maniobra de izado pueden generar un sobreesfuerzo en los cables de izado o en la fijación del carro a la estructura que podría poner en peligro la operatividad o incluso la integridad de la propia estructura. Por lo tanto, la necesidad de un sistema de control y monitorización que sea capaz de detectar cualquier tipo de anomalía durante el proceso es de interés. Se presenta aquí la propuesta de monitorización de la fijación a la estructura para cada uno de los cuatro carros de izado de dovelas del nuevo puente de la bahía de Cádiz.
Cada carro tiene un peso de aproximadamente 220 toneladas, una longitud de 25m y va fijado a la estructura a través de cuatro apoyos, dos en el marco trasero y dos en el marco central. Cada uno de los dos apoyos traseros está compuesto por 4 cables pretensados de 53mm de diámetro, por lo que en el marco trasero habrá 8 cables en total.
Por esta razón se ha decidido colocar una célula de carga para cada uno de los 8 cables traseros de manera que en total sean necesarias un total de 32 células de cargas para los 4 carros. Se va a colocar también un mástil meteorológico por cada carro que proporcione medidas de dirección e intensidad del viento. De esta manera se habrá configurado un sistema de monitorización que por un lado vigile una correcta distribución de cargas en la partes más crítica de la fijación del carro de izado a través de las células de carga, y por otro lado suministre información acerca de las condiciones climatológicas para determinar si el proceso de izado se puede realizar en condiciones de operatividad satisfactorias. Ambos sistemas constan de un sistema de alarma que permite avisar en tiempo real en el momento en que se detecte alguna anomalía.
The raising into position of the bridge deck sections during construction of a cable stayed bridge is a complex operation and constitutes one of the more critical construction phases of the bridge. Any error in the estimation of the forces exerted in the structure or failure during the maneuver has the potential to generate overloading of the raising cables or disrupt the integrity of the bridge. Thus, detailed monitoring of the structural loading and environmental conditions during the maneuver is important for early detection of any anomaly in the loading distribution. This article will discuss the structural monitoring of the four (4) lifting carriages during the construction of the bridge crossing Cadiz Bay.
Each carriage has an approximate mass of 220T, and dimensions of 60m by 25m, fixed at four locations to the existing bridge deck at four locations, two at the rear position and two at the central section of the carriage. Fixing at each of the two rear positions is achieved with four (4) pretensed cables of 47mm diameter, each of which is monitored in the current study with an 80T compression load cell. To complete the measurement campaign, each carriage is equipped with a meteorological mast to provide instantaneous measurements of the wind conditions (10min mean wind speed and directionality in addition to 3sec gust) associated to each carriage.
The monitoring system is configured to provide continuous vigilance of the loading distribution for each raising carriage, in addition to providing information related to the onsite wind conditions for assessing the suitability of operational conditions. Both systems are linked to a common off-site data management center, which is incorporated with an alert system for alarming all necessary personal if any anomaly is detected in real-time.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados