Radiador de luz. Oficina comercial AgriEnergia
- Autores: Eduard Callís, Guillem Moliner Milhau, Jesús Bassols
- Localización: On diseño, ISSN 1695-2308, Nº. 384, 2018
- Idioma: español
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Resumen
La formalización de un gran radiador luminoso actúa en tanto que elemento de reclamo de este local, desarrollando una potente imagen cuyo principal argumento es la celebración de la integración de la energía eléctrica en la arquitectura de los años veinte.
La compañía eléctrica AgriEnergia se acerca al ciudadano abriendo una oficina de atención al cliente en un local en esquina en la población de Banyoles. Una mampara-lámpara y el cambio de ubicación del acceso articulan la intervención.
Sobre la diagonal del local se instala un radiador luminoso, de geometría ondulada, que reconoce la esquina y separa la oficina en dos ámbitos: uno dedicado a la atención al público y otro para despachos y dependencias privadas. Lunas planas, dispuestas siguiendo la traza de la mampara y en perpendicular, configuran el radiador luminoso. Las lamas tienen el papel de aprisionar y multiplicar la luz, caracterizando la atmósfera del espacio. La repetición y la curvatura le otorgan una visión vibrante que contribuye a desmaterializar el vidrio.
La mampara es, de hecho, una gran lámpara que actúa como reclamo del local, coronada por unos motivos dorados que la fijan al techo. El conjunto celebra el episodio clave de la integración de la energía eléctrica en la arquitectura de los años veinte. Al mismo tiempo explicita una de las formas que toma el producto que se despacha en esta oficina: la luz.
El radiador luminoso está formado por dos capas de luna plana de vidrio laminado, con butiral traslúcido. Una sigue el trazo curvado de la mampara. La otra, formada por lunas de 20cm de ancho, se dispone de forma perpendicular. Este sistema resuelve la curva de forma económica, oculta las juntas del cristal y otorga un aspecto vibrante al conjunto, que varía según el punto de vista. Por encima de todo permite bañar de luz la mampara en toda su altura, desde una fuente lineal de LED RGB de 13W/m alojada detrás de la cornisa superior.
La luz de las mamparas se coordina cromáticamente con el rótulo retroiluminado de la entrada, permitiendo adoptar los distintos colores corporativos de la compañía o celebrar días señalados.
La cornisa de acero dorada es la pieza que fija las lunas de cristal al techo. Por la parte inferior se apoyan fresados y lacados sobre una estructura metálica revestida con paneles de aglomerado. Las mesas de trabajo se despliegan del zócalo de la mampara, formando un conjunto unitario. La mampara, de tres cuerpos texturados, resalta sobre un pavimento continuo de microcemento y un falso techo acústico con acabado brillante.
