Nuevo edificio de vestuarios en el campo de futbol de “La Barruana”
- Autores: Carlos Llinás Carmona
- Localización: On diseño, ISSN 1695-2308, Nº. 367, 2017
- Idioma: español
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Resumen
La condición de límite urbano del sector ocupado por el campo de fútbol de “La Barruana”, en Sant Vicenç dels Horts, ha sido sabiamente incorporada a las estrategias con las que se ha proyectado el edificio que acoge los nuevos vestuarios y el correspondiente graderío.
Este proyecto, promovido por el Ayuntamiento de Sant Vicenç dels Horts y llevado a cabo por los Servicios Técnicos del Área Metropolitana de Barcelona (AMB), tenía por objeto reformar y completar el equipamiento deportivo del campo de futbol de “La Barruana” que, hasta aquellos momentos, constaba de unos vestuarios de características obsoletas y un terreno de juego pavimentado con “sauló”.
El proyecto planteaba una actuación en tres fases, de las cuales se han llevado a cabo las dos correspondientes a la instalación del césped artificial y a la construcción del nuevo edificio de los vestuarios, que incluye un graderío con capacidad para doscientas personas sentadas. La última fase incluirá el derribo del antiguo edificio de los vestuarios así como la finalización de la urbanización del sector que rodea el emplazamiento.
La actuación, por lo tanto, ha consistido en plantear un único edificio de vestuarios y graderío, adosados al lado norte del campo de fútbol, en el límite situado entre la zona residencial e industrial en la que se halla el equipamiento, con un acceso principal a nivel de la primera planta, con lo que se facilita el acceso del público a la zona de las gradas. Esta condición de límite urbano condicionó la decisión de optar por un edificio en continuidad con las nuevas vallas del recinto, tanto formal como constructivamente, a partir de la elección de un único material, el hormigón armado y encofrado con tablilla de madera.
La organización funcional de los espacios se produce a través de un vestíbulo situado en la planta de acceso, que separa las circulaciones de jugadores y público hacia las gradas y los vestuarios situados en la planta baja. En la primera planta, además del vestíbulo de acceso a las gradas, se encuentran los despachos correspondientes a los trabajos administrativos y de gestión, los lavabos públicos y un pequeño bar al que se puede acceder directamente desde la vía pública. Con el objeto de evitar el recorrido del público a través del propio terreno de juego, se ha planteado tanto el acceso como la salida del campo desde la primera planta.
