Vivimos en tiempos de repliegue y de preferencias de compra más alejadas de las tradicionales, pero cada vez hay más gente que quiere volver a construir relaciones y consumir en sus barrios, en los comercios de toda la vida. La sociedad actual no pone fácil esto, en parte por los ritmos frenéticos, los horarios laborales y la búsqueda del consumo fácil y cómodo. La tecnología puede haber ayudado a horarios laborlales y a la búsqueda del consumo fácil y cómodo. La tecnología puede haber ayudado a ello, pero también puede ayudar a conseguir lo contrario: conocer vecinos para intercambiar favores o buscar gente con intereses comunes
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