Salamanca, España
El delito de «enriquecimiento ilícito» fue incorporado al C.P. argentino en 1964. Asimismo, se halla previsto en otros ordenamientos latinoamericanos y en las Convenciones contra la Corrupción de la O.E.A. y la O.N.U.. En España, actualmente se discute la conveniencia o no de su incriminación. En concreto, el problema central de esta figura radica en que "prima facie" vulnera garantías fundamentales. En Argentina, esta cuestión ha tenido un importante desarrollo doctrinal y jurisprudencial. Fundamentalmente, a partir del fallo «Alsogaray» (Cámara Federal de Casación Penal, 2005) se ha consolidado un criterio jurisprudencial favorable a su constitucionalidad. Por otra parte, desde la perspectiva político-criminal, se observan similitudes con la formulación del «blanqueo de capitales» impulsada desde organismos internacionales
The offence of «illicit enrichment» was incorporated to the Argentine’s Cri-minal Code in 1964. In the same way, it is inserted in many Latin-American’s codes and in the O.E.A.’s and O.N.U’s Conventions against Corruption. At present, in Spain it is being discussed the convenience or not of this incrimination. In short, the central problem of this offence is that it damages fundamental guarantees. In Argentina, this question has had an important develop-ment by doctrine and jurisprudence. Fundamentally, from the leading case «Alsogaray» (Federal Court of Penal Cassation, 2005), a jurisprudential position favorable to his constitutionality has been consolidated. On the other hand, from the politician-criminal’s perspective, it observes simi-larities with the formulation of «money laundering» promoted by international organizations
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