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¿Podemos controlar la expansión del erizón mediante quemas?

    1. [1] Universidad de Zaragoza

      Universidad de Zaragoza

      Zaragoza, España

    2. [2] Instituto Pirenaico de Ecología

      Instituto Pirenaico de Ecología

      Zaragoza, España

  • Localización: Lucas Mallada: revista de ciencias, ISSN 0214-8315, Nº. 19, 2017, págs. 69-94
  • Idioma: español
  • Enlaces
  • Resumen
    • español

      El erizón (Echinospartum horridum) es uno de los arbustos más abundantes y con mayor amplitud ecológica del Pirineo central. Su expansión en amplias superficies de pastos parece obedecer a los cambios en las condiciones socioeconómicas (descenso de la población rural, descenso de la carga ganadera…) y a la prohibición del fuego pastoral. En este artículo se evalúan los efectos que la quema prescrita tiene sobre la sucesión vegetal (mediante transectos), a lo largo de una cronosecuencia de 35 años, y sobre la erosión del suelo, estimada según el modelo ERMIT.

      La quema prescrita del espinal de erizón conduce a un transitorio aumento de la diversidad vegetal que alcanza su máximo a los tres años. A partir de entonces ambos parámetros descienden progresivamente para recuperar sus bajos valores iniciales. El erizón germina profusamente tras la quema, ocupando una cuarta parte de la cubierta vegetal total a los dos o tres años y la mitad de la misma a los seis años. Se trata de un claro ejemplo de autosucesión vegetal posincendio, carácter propio de comunidades pirófitas. El resto de especies que colonizan temporalmente el espinal quemado tienen un valor pastoral bajo en relación con el pasto circundante que, además, suele ser excedentario para la carga ganadera que soporta actualmente. Por tanto, la quema del espinal de erizón, en las actuales condiciones, supone su rejuvenecimiento pero no su sustitución por otras comunidades.

      La superficie de suelo desnudo suele ser baja tras la quema prescrita generada en óptimas condiciones, inferior al 50%, al dejar muchos residuos (ramas y hojarasca más o menos chamuscadas) en superficie. Bajo esas condiciones y con laderas suaves se estima que pueden perderse unas 4 toneladas de suelo/ha para el primer año. Si la quema es de mayor severidad, y se produce en laderas de fuerte pendiente, se prevén mayores pérdidas de suelo, de unas 20 toneladas/ha para el primer año. Estos valores descienden progresivamente con el tiempo, tal y como se produce la recuperación de la cubierta vegetal.

    • English

      The erizón (Echinospartum horridum) is one of the most abundant bushes of central Pyrenees which also covers the greatest ecological scope of that area. Its expansion in large areas of pasture seems to be due to changes in socio-economic conditions (decline of the rural population, decrease of the cattle load…) and to the prohibition of pastoral fire. This project evaluates the effect that prescribed burnings have had on vegetation succession over a chronosequence of 35 years and on soil erosion (according to the ERMIT model).

      Prescribed burnings of the erizón lead to a transient increase of the vegetation richness and diversity, which reaches its peak after 3 years. From then on, both parameters decrease progressively to recover their original initial low values. The erizón germinates profusely after the burning, occupying a quarter of the total vegetation cover after two or three years and half of it after six years. It is a clear example of post-fire plant auto-succession, a distinctive characteristic of pyrophyte communities. However, the plants which conquer the spinal have a moderate pastoral value in relation to the surrounding pasture. Moreover, they represent a surplus in relation to the existing cattle needs. Over time, the number of plant species decreases (after 3 or 4 years), to goes back to its original situation After a prescribed burning of erizón in optimal conditions, the bare soil surface is usually low (less than 50%) leaving many residues (more or less charred branches and litter fall) on the surface. Under these condition, and with smooth slopes it is estimated that about 4 tons/ha can be lost in the first year. If burning is more severe, and occurs on steep slopes, greater soil losses of about 20 tons/ha for the first year can be expected. These values gradually decrease over time, similarly to the recovery process of the vegetation cover.


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