¿Qué opina el alumnado universitario sobre la violencia contra la mujer?

• Autores: Rebeca Diéguez Méndez, José Ignacio Muñoz Barús, María Sol Rodríguez Calvo
• Localización: Trazos de xénero no século XXI: III Xornada Universitaria Galega en Xénero, Pontevedra, 5 de xuño 2015 / Anabel González Penín (dir.), Ana Jesús López Díaz (dir.), Eva Aguayo Lorenzo (dir.), 2015, ISBN 978-84-8158-694-7, págs. 383-391
• Idioma: español
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  • La violencia de pareja contra la mujer supone una violación de los derechos humanos y un importante problema de salud que requiere de la intervención de profesionales tanto del ámbito sanitario como jurídico. Es importante conocer las opiniones y actitudes de futuros profesionales sobre este tema, lo que permitirá proponer medidas para mejorar su formación. El objetivo de este trabajo ha sido investigar los conocimientos y las actitudes del alumnado universitario frente a la violencia de pareja. Para ello se elaboró y se distribuyó una encuesta entre el estudiantado de la Universidad de Santiago de Compostela, perteneciente a las titulaciones de criminología, derecho, enfermería y medicina. Posteriormente se realizó un análisis descriptivo.

    Obtuvimos un total de 491 encuestas. Más de la mitad (53,56%) del alumnado había recibido formación en el tema, aunque la gran mayoría (92,06%) pensaba que ésta era fundamental para el personal sanitario.

    Casi el 96% consideraba la violencia de pareja un problema importante en nuestro país, aunque la violencia contra las niñas y niños era la que más preocupaba entre el alumnado y la que se produce entre adolescentes la que menos. El 72,1% conocía los servicios de ayuda para las víctimas, pero casi el 67% no creía que contasen con suficiente apoyo. Más del 80% denunciaría un caso de violencia aunque la víctima le pidiese que no lo hiciera.

    Los datos muestran que aunque el estudiantado tiene algunas ideas equivocadas sobre la violencia de pareja y recibe poca formación sobre el tema, consideran que esta violencia es un problema grave en nuestra sociedad y entienden que debe mejorarse la atención a las víctimas. Los programas de estudios, tanto de medicina y enfermería como de derecho y criminología, deberían ofrecer más oportunidades educativas sobre este problema.