Global Threat Landscape in 2018

• Autores: Rohan Gunaratna
• Localización: Revista UNISCI / UNISCI Journal, ISSN-e 2386-9453, Nº. 46, 2018 (Ejemplar dedicado a: Taiwan´s Foreign and Security Policy, Terrorism, European Security, Post-Conflict in Colombia), págs. 139-144
• Idioma: inglés
• Títulos paralelos:
  • El Panorama de la amenaza global en 2018
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• Resumen
  • español

    La amenaza terrorista mundial se ha vuelto descentralizada, impredecible, difícil de detectar, resistente y con capacidades regenerativas. Los movimientos yihadistas globales, principalmente el llamado estado islámico (IS) y al-Qaeda, se han glocalizado, explotan los agravios internos, reclutar a los jihadistas y luchan por causas locales y mundiales. En general, IS y al-Qaeda se han convertido en redes subterráneas de terror. En 2018, es probable que tres tendencias definan el panorama mundial del terrorismo: IS se está transformando de una ' entidad en construcción de un `califato´ a un movimiento terrorista global; Is se está descentralización, desplazando su centro de gravedad desde Irak y Siria hacia múltiples wilayas y divisione territorialess en diferentes países; Las filiales de alQaeda en Siria capitalizarán el vacío dejado por IS y explotarán la frágil e inestable situación en la Siria post-IS. Con el fin de prevenir su resurgimiento y la pérdida de una victoria duramente conseguida, es imperativo que la comunidad internacional aborde las condiciones subyacentes que facilitaron el ascenso de IS, al-Qaeda y otros grupos militantes en Irak y Siria, las cuestiones que dan sustento a otros grupos terroristas y militantes, así como apoyar a los gobiernos que carecen de capacidades para luchar contra el terrorismo.

  • English

    The global terrorism threat has become decentralised, unpredictable, hard-to-detect and resilient with regenerative capacities. The global jihadist movements, principally the so-called Islamic State (IS) and Al-Qaeda, have glocalised to exploit indigenous grievances, recruit aspiring jihadists and fight for local and global causes. Overall, both IS and Al-Qaeda have become underground terror networks. In 2018, three trends are likely to define the global terrorism landscape: IS is transforming itself from a ‘caliphate’-building entity to a global terrorist movement; IS is decentralising, shifting its centre of gravity from Iraq and Syria to its multiple wilayat and divisions in different countries; Al-Qaeda affiliates in Syria will capitalise on the vacuum left by IS and exploit the fragile and unstable situation in post-IS Syria. In order to prevent IS’ re-emergence and losing the hard-fought victory, it is imperative that the international community address the underlying conditions that facilitated the rise of IS, AlQaeda and other militant groups in Iraq and Syria, the issues that give sustenance to other terrorist and militant groups, and support governments that lack capabilities to fight terrorism.