A diferencia de Jesús, los protagonistas de La vaquilla de Luis García Berlan- ga sucumben ante las tres tentaciones que se les presentan, mismas que en- cuentran correspondencia con las tres seducciones mundanas que refiere el apóstol Juan en su primera epístola: los deseos de la carne, los deseos de los ojos y la vanagloria de la vida. En este trabajo, estudiaremos las tentaciones a la luz de estudiosos como Abraham Maslow para demostrar que los deseos o instintos naturales se presentan en el filme como atractivas tentaciones que muestran lo imperfecta, frágil e instinti- va que es la naturaleza humana al tiem- po que esconden o revelan la identidad verdadera del individuo.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados