Aunque la caricatura unánime y derogatoria hacia su persona se ha consolidado como el mejor de los escudos, al controvertido 45º presidente de los Estados Unidos no le faltan aliados cualificados. Desde una indisimulada simpatía ideológica, Frank G. Rubio cita a algunos de ellos y explica sus razones
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados