Resumen de Un presupuesto falso y regresivo
El presupuesto del año 2001 no da una imagen fiel de la actividad económica del Estado. Múltiples operaciones no se han tomado en cuenta, o lo han sido por cuantías inferiores a las reales. El rigor ha caído delante de las necesidades políticas de Aznar. Los gastos deliberadamente se han calculado a la baja, para poder presentar un volumen de gasto público inferior al que de verdad existe. Los ingresos siguen evolucionando al alza, como consecuencia del alto crecimiento. El déficit público se dice que desaparecerá. Podría incluso no haberse esperado al 2001, equilibrando esas cuentas en el 2000. Si se ha actuado así es para marcarse un tanto propagandístico, para presumir sacando pecho a costa del gasto social. Los presupuestos son iguales a los que el PP viene presentando desde 1997. En la continuidad de la desigualdad social está la clave.
