La Ley 39/2015 nace con una voluntad uniformadora y simplificadora estableciendo un procedimiento administrativo común reconocible en todas las administraciones públicas. Sin embargo, dicha intención queda rápidamente frustrada en el mismo texto al excluir determinados procedimientos y habilitar la introducción y supresión de trámites, convirtiendo el procedimiento administrativo común en el menos común de los procedimientos.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados