Entre las medicaciones más modernas y que, a nuestro juicio, merecen a atención del odontólogo, encontramos el orthoformo, la nirvanina, la cloretona y la argonina. El orthoformo es un éter metilado compuesto de ami-doxi-aci-benzoico, insípido, indoloro, no tóxico ni irritante, antiséptico, poco soluble y de marcadísimas propiedades anestésicas. La nirvanina posee la misma acción anestésica que la cocaína pero no su grado de toxicidad; además es soluble. La cloretona es un compuesto de potasa cáustica, cloroformo y acetona, que posee gran propiedad anestésica. La argonina, por su parte, posee notables propiedades antisépticas, por lo que está indicada para el tratamiento de supuraciones, abscesos crónicos, piorrea alveolar, etc. pero no destrona a otros preparados de más segura y positiva acción.
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