Se presentan dolores después de las extracciones practicadas cuando: se ha empleado una solución concentrada o de excesiva cantidad de líquido inyectado; existe una inflamación ya intensa (absceso, formación quística); se usa una solución no esterilizada; existe una infección subsiguiente a la extracción, generalmente una auto-infección.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados