Se analizan los beneficios que se obtienen en una empresa en que se esté aplicando un sistema de mantenimiento programado al implantar un sistema de mantenimiento según estado, en el que solo se inspeccionan y revisan los equipos sobre los que se tiene el convencimiento de que se está empezando a desarrollar una avería. Los beneficios obtenidos se refieren a la disminución de los gastos directos de mantenimiento, por reducción de acciones no necesarias; a la disminución de los periodos dedicados al mantenimiento, con su repercusión en la prolongación de los periodos de operatividad; a la disminución de averías catastróficas; a la previsión y evaluación de las operaciones concretas de mantenimiento preventivo a realizar en la próxima parada; y a la utilización como medio de inspección en la recepción de elementos y trabajos de reparación. Como herramienta clave en los modelos de mantenimiento aparece el análisis de vibraciones, mediante analizadores portátiles o equipos de medición y análisis automatizados e incluso con la incorporación de sensores a la propia estructura.
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