Los periodistas deben ser conscientes de la doble obligación que tienen cuando cubren conflictos armados: moldear las opiniones públicas sobre sus causas y consecuencias y la capacidad de influir en su desarrollo y posible solución. Cerrar los ojos a cualquiera de ellas equivale a abandonar su responsabilidad profesional para con una sociedad democrática que quiere vivir en paz.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados