Colombia
El afecto es fundamentalmente corporal. La angustia se siente en el cuerpo. Ella desarregla las funciones vitales, en tanto se trata del cuerpo de un sujeto, del cuerpo que sostiene la relación de dicho sujeto con el lenguaje. Los desarreglos de las funciones vitales son, entonces, efecto de la angustia como afecto, no su causa, como pretenden las hipótesis neurobiológicas que afirman que los cambios biológicos anteceden a los trastornos de la conducta, a los que queda reducido el sufrimiento psíquico ligado a dichos cambios. Debate con la neurociencia acerca del hecho que, en la angustia, no se trata sólo de un déficit o una alteración en el funcionamiento del organismo, sino de un afecto que afecta el cuerpo de antemano afectado por el lenguaje. El lenguaje organiza pero también desordena el cuerpo vivo; su goce
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados