Arrondissement Brugge, Bélgica
Los dos Estados más comprometidos con la Política Europea de Vecindad en el Este, Moldavia y Georgia, son un buen ejemplo de que dicha política puede tener un cierto impacto positivo en la sociedad, economía y política de los Estados socios a través de la promoción de reformas democráticas y económicas. No obstante, su impacto hasta ahora ha sido considerablemente limitado cuando se trata de resolver los conflictos secesionistas de estos países: Transnistria en el caso de Moldavia, y Abjasia y Osetia del Sur en el caso de Georgia. A lo largo de este trabajo se intentará defender que la razón de ello reside en el hecho de que los intereses de algunos Estados miembros superan los intereses comunes de la UE, especialmente cuando temen las reacciones coercitivas del Kremlin, debido a la importancia energética de Rusia.
The two States that have engaged the most with the European Neighbourhood Policy in the East, Moldova and Georgia, are a good example that this policy could have a certain positive impact on the society, economy and politics of the partner States through the promotion of democratic and economic reforms. Nonetheless, until now, the policy’s impact has been significantly limited when dealing with the resolution of the secessionist conflicts of these countries: Transnistria in the case of Moldova, and Abkhazia and South Ossetia in the case of Georgia. Throughout this paper the author will defend that the reason for this lies on the fact that the interests of some Member States weight more than the EU common interests, especially, when they fear Kremlin’s coercive reactions, given Russian energetic significance.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados