Sevilla, España
En la segunda mitad del siglo XVIII Rousseau puso de moda la expresión como fundamento de la actividad filosófica. Poco después Lavater popularizó la Fisiognómica como una disciplina potencialmente universal. A finales de siglo en el entorno del Clasicismo de Weimar y del Romanticismo de Jena se comenzó a desarrollar dicho potencial en la teoría estética y literaria. En este marco los hermanos Humboldt dieron un paso más y extendieron el principio de expresión a las ciencias de la naturaleza y del espíritu. Finalmente, todas estas tendencias fueron elaboradas filosóficamente por Schopenhauer, formando el núcleo de su doctrina.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados