Colombia
La búsqueda de calidad en la educación requiere claridad en los procesos formativos, reconocimiento de estímulos y una inversión apropiada. Los docentes necesitan formación y motivación continua para la buena enseñanza, al igual que óptimas condiciones laborales. La evaluación es adecuada si se realiza con propósitos formativos; no se considera aceptable utilizarla para desprestigiar la profesionalidad de los maestros y para congelar los escalafones salariales e impedir el mejoramiento de sus ingresos. Separar la evaluación del desempeño y la evaluación de competencias ha sido una forma de obligar a los docentes a que financien su propia formación, dejando a un lado la responsabilidad del Estado para invertir en el desarrollo profesional. Dos estatutos y dos escalafones salariales rigen la carrera docente, lo cual ha traído un sinnúmero de tensiones entre el autoritarismo gubernamental y el espíritu gremialista. Este artículo es un avance de investigación sobre la evaluación del desempeño docente y su relación con la calidad de la educación y persigue sensibilizar sobre lo que sucede luego de una década de vigencia de la evaluación.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados