Al conocer un poco la creatividad, vemos inmediatamente que es importante para el mantenimiento de nuestra cultura; luego hay que destinar tiempo para el desarrollo del espíritu creativo. Además, debemos desarrollar el arte del comportamiento persistente y reflexivo, y destinar tiempo suficiente para crecer y florecer. Debemos partir de que la creatividad es un proceso desordenado, que es totalmente personal, que es un viaje a lo desconocido. También hay que destacar que no hay tratado alguno acerca de cómo llegar a ser creativo, cómo enseñar creatividad o cómo desarrollar creatividad; unas veces es una serie de pasos personales, de procedimientos de ensayo y error, y otras veces se trata de un proceso de saber clasificar, saber asociar, detectar qué conocimiento se tiene guardado en el cerebro
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados