Las políticas de inmigración: la construcción de nuevas formas de ciudadanía y de atribución de derechos para las personas extranjeras

• Autores: José Luis Monereo Pérez
• Localización: Revista de derecho migratorio y extranjería, ISSN 1695-3509, Nº. 34, 2013, págs. 11-67
• Idioma: español
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• Resumen

  • En la crisis mundial del empleo, los trabajadores migrantes son una población de riesgo, especialmente vulnerable en términos generales. La elaboración de las políticas migratorias de la Unión Europea y de los países que forman parte de la misma se orienta decididamente hacia un enfoque selectivo y jerarquizado respecto del reconocimiento de los derechos de ciudadanía; y especialmente en la coyuntura de crisis económica se impulsan y promueven medidas más restrictivas de admisión y de expulsión y retorno incentivado de las personas inmigrantes (migraciones frustradas y de retorno desde los países de destino a los países de origen). Una Europa que utiliza una racionalidad económica instrumental respecto de las personas migrantes en su conjunto y que no ha sabido impedir la expansión de un mercado de trabajo informal donde se explota a ciudadanos de terceros países en situación irregular. Por contrario, la plena coherencia con la racionalidad inherente al constitucionalismo democrático-social debería suponer que se regulasen las migraciones desde la perspectiva de la garantía a las personas migrantes de una ciudadanía plena, integral e inclusiva en el marco del Derecho Internacional de los Derechos Humanos y de la forma política del Estado Social de Derecho. La política migratorio de la Unión Europea debe formar parte del modelo social europeo, o más precisamente del constitucionalismo democrático-social europeo.